Tenía pánico a que llegara ese día, Otto estaba enfermo y me aterraba despertar una mañana y que no estuviera... luchábamos y luchaba por intentar ganar la partida al cáncer, aunque en estos 2 meses cada día se complicaba un poco mas.
Otto lo supo hacer bien, no se fue sin mas, esperó el momento adecuado, a que estuviéramos los tres juntos, fuimos a dar un paseo, caminó hacia nosotros y se durmió para siempre en nuestros brazos ... fue como el primer día que nos conocimos, pero esta vez , no era un "hola " era un "adiós, hasta siempre".
Por ultima vez acudiamos a nuestra veterinaria desesperados, con la esperanza de que ocurriera lo imposible (Otto había salido de tantas) pero esta vez ya no habían mas vidas, la partida había terminado y Otto ya no despertó.
Otto me ha aportado muchas cosas buenas, me ha echo descubrir cosas de mi que desconocía... no sabia que se podía querer tanto a los animales, no sabia que podía tener tanta fuerza escondida en algún sitio para seguir adelante cuando me dijeron "tiene cáncer , su pronostico de vida es muy corto" , todavía me pregunto de donde sacaba tantas ganas de luchar, de buscar información por todas partes, pero no tengo respuesta para esto, me alegra saber que ante una piedra tan grande en mi camino saqué fuerzas para apartarla y seguir adelante, y que J y M podemos ser uno y luchar juntos.
Otto ha dejado una herida enorme en nosotros, que poco a poco conseguiremos cerrar , superar el dolor y seguir adelante, pero también ha dejado una huella enorme en nuestros corazones que es imborrable.
Cuando lo adoptamos pensábamos que lo estábamos salvando, en realidad ahora me doy cuenta de que era él el que nos estaba salvando a nosotros.
Gracias Otto, Gracias Valiente
- M y J -
